
Indudablemente el de Ingrid Betancur es, de lejos, el secuestro más emblemático de la historia, tanto así que su imagen de mujer torturada es el símbolo de la lucha por la libertad en todo el planeta. Al parecer las condiciones de su secuestro han sido especialmente duras en represalia por su carácter indómito, que la ha llevado a intentar fugarse cada vez que lo ha creído posible.
Sin embargo a su dura experiencia se ha sumado, negativamente, el papel desempeñado por su señora madre, doña Yolanda Pulecio, quien, comprensiblemente atribulada por su situación, se había convertido en una especie de parlante o altavoz que perifoneaba por todo el mundo un discurso antiuribista en el que culpaba al presidente de la larga espera, sin darse cuenta de que con ello se estaba clavando el puñal, pues a nadie más que a la guerrilla le interesaba más tener – gratis - semejante campaña contra el gobierno. Mientras que ella persistiera en hacerle la campaña a las FARC, éstas no tendrían afán en soltarle a su hija. Por eso, además de por constituir una especie de seguro o blindaje a los jefes - una vez liberada la orden del gobierno sería la de “tierra arrasada” o ataque final contra la guerrilla - siempre se supo que sería la última en salir. Se dice que, por fin, alguien hizo que doña Yolanda corrigiera su actitud. Pero tampoco la sueltan.
Sin embargo a su dura experiencia se ha sumado, negativamente, el papel desempeñado por su señora madre, doña Yolanda Pulecio, quien, comprensiblemente atribulada por su situación, se había convertido en una especie de parlante o altavoz que perifoneaba por todo el mundo un discurso antiuribista en el que culpaba al presidente de la larga espera, sin darse cuenta de que con ello se estaba clavando el puñal, pues a nadie más que a la guerrilla le interesaba más tener – gratis - semejante campaña contra el gobierno. Mientras que ella persistiera en hacerle la campaña a las FARC, éstas no tendrían afán en soltarle a su hija. Por eso, además de por constituir una especie de seguro o blindaje a los jefes - una vez liberada la orden del gobierno sería la de “tierra arrasada” o ataque final contra la guerrilla - siempre se supo que sería la última en salir. Se dice que, por fin, alguien hizo que doña Yolanda corrigiera su actitud. Pero tampoco la sueltan.
14 comentarios:
Si, que mamera los uribistas, y los anti-uribistas
A mi me parece que esta señora es una oportunista de miedo
Estoy de acuerdo con el señor Luis Raul. Además hablar maravillas de Chávez y considerarlo un SEÑOR, UN CABALLERO. por favor
A pesar de su dolor y su problema personal, lo que dice es basura.
solo DIOS puede mover el corazon de la guerrilla para liberar a INGRID
Estoy de acuerdo con el columnista. Señora pulecio pensar que el daño a su hija se lo esta haciendo usted misma, dice !si la entregan dejaran de ser terroristas!! y los demas que?
YA ESTA BIEN SU ACTITUD SOBERBIA, HALLA QUEDARON TAMBIEN SOLDADOS, MILITARES Y CIVILES QUE A TODOS NOS INTERESAN.
En esta epoca les gusta imitar las cosas buenas que hacen otras personas (las malas también), asi no tengan con que, pero consiguen
Yo le pregunto a Yolanda Pulecio, quien es el o la responsable de que su hija este secuestrada?
Comprendo a Yolanda,su duelo es de cada dia,casi peor que la muerte, pero no es la unica que ha sufrido, en este pais,hay miles que estan en esas circunstancias.
Con todo respeto a esta senora ya se le fue la mano!
por Dios esta señora se sumo al mercado que la negrita cordoba, chavez y farc quieren hacer de colombia,
La señora Pulecio tiene toda la razó. Recordemos que si se hubiera despajado Pradera, los asambleístas vallecaucanos estuvieran vivos.
No que decir esta arpia conmovio al mundo con su carita yo no fui, y salio mas reputa la zorra
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